Las Islas Cíes son un destino idílico para realizar una escapada por muchas razones: sus extensos y finos arenales, sus aguas cristalinas o sus largos senderos para realizar caminatas con vistas impresionantes.
Pero, además de todos estos encantos, poca gente conoce el potencial de las Islas Cíes para realizar turismo ornitológico. La observación de aves es una actividad ideal para realizar en un entorno natural tan privilegiado como es el archipiélago de Cíes.
Sin duda, observar a las aves en su día a día es una actividad muy relajante para realizar en tu visita al Parque Nacional Marítimo-Terrestre de las Islas Atlánticas de Galicia. No hace falta ser un experto en el avistamiento de aves para disfrutarlo de manera auténtica: si quieres observar aves en Cíes solo tienes que hacerte con unos buenos prismáticos y seguir algunas recomendaciones.
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Los observatorios de aves de las Islas Cíes
En Cíes se pueden encontrar dos observatorios estratégicamente ubicados, el del Alto da Campá en la isla del Faro y, menos concurrido, el del Faro do Peito, situado en la isla de Monteagudo. Ambos observatorios cuentan con unas vistas privilegiadas, tanto para disfrutar del paisaje, como para tomar fotografías o practicar el avistamiento de aves.
En la isla del Faro encontrarás el Observatorio de aves del Alto da Campá, desde el que podrás observar los acantilados donde los cormoranes y las gaviotas patiamarillas anidan. Además, la panorámica de los acantilados de la Isla Norte, la de Monteagudo, será espectacular.
Por otro lado, en la Isla Norte o isla de Monteagudo, podrás visitar el observatorio situado en el entorno del Faro do Peito, construído en 1904. Desde este punto, se pueden contemplar el ecosistema y el hábitat de las colonias de aves marinas de la cara este de la Isla Norte, entre los acantilados o en las repisas y altos de las furnas.
Además de aves, a lo largo del sendero que te lleva a este punto, es posible avistar otras especies únicas de fauna terrestre, como otras aves, mamíferos o reptiles.
En estos rincones, lo más importante es no alterar la tranquilidad de los animales, algo verdaderamente importante. Sin ir más lejos, tanto Cíes, desde el año 1988, como Ons son Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA).
Aves en las Islas Cíes: la gaviota patiamarilla y el cormorán moñudo
Las aves marinas son el reclamo animal más interesante del archipiélago. En total, nidifican seis especies de estas aves en el Parque Nacional Marítimo-Terrestre de las Islas Atlánticas de Galicia. También, se pueden avistar 11 especies más con facilidad, dependiendo de la época del año.
Entre todas estas especies de aves, destacan las gaviotas, cormoranes, charranes, paíños y pardelas, álcidos y alcatraces. La riqueza biológica de Cíes sustenta, sobre todo, valiosísimas colonias de gaviota patiamarilla y de cormorán moñudo.
La gaviota patiamarilla
Una de las especies más importantes de las Islas Cíes es la gaviota patiamarilla, un ave de gran tamaño con el manto gris y algunas partes inferiores y de la cabeza en color blanco. Sus patas son de color amarillo anaranjado, como su propio nombre indica.
En todo el Parque Nacional nidifican, en total, más de 16.000 parejas de esta especie, repartidas a lo largo de todas las islas e islotes. En el archipiélago de las Islas Cíes se pueden encontrar 7.000 de estas parejas.
Habitualmente, nidifican en los márgenes de los senderos o rutas principales. Por ejemplo, en la Isla del Faro, lo más habitual es encontrar gaviotas patiamarillas en la zona del Faro de Cíes. Dependiendo de la época del año, pueden avistarse sus nidos, concretamente desde finales de abril. Al llegar mayo, ya se pueden ver sus crías, de buen tamaño y color pardo, que tardan cuatro años en tener el plumaje blanco y gris de las gaviotas adultas. Cuando entra septiembre, estas aves abandonan sus colonias de nidificación, para, posteriormente, regresar en marzo.
Es importante tener cuidado con estas aves, ya que, a pesar de que están acostumbradas a los humanos, no quieren su presencia muy cerca de sus nidos.
El cormorán moñudo
Otra especie de gran relevancia en las Islas Cíes es el cormorán moñudo, un ave marina de color negro, cabeza pequeña, pico fino, cuello largo y plumaje con reflejos verdosos. Durante los seis primeros meses del año, los cormoranes adultos tienen un copete en la parte superior de la cabeza.
En el Parque Nacional de las Islas Atlánticas hay, aproximadamente, 1.100 parejas de este ave. En Cíes se encuentran 300 de estas parejas. Los cormoranes podrán avistarse en vuelo, posados en las rocas o en el medio del mar, incluso nadando con el cuerpo parcialmente sumergido. Pueden estar tanto en grupo, como solos.
Entre enero y julio, los cormoranes se agrupan en colonias alrededor del entorno de las islas. Cuando llega el invierno, se dispersan. Un punto ideal de las Islas Cíes para observar esta especie es el islote de Viño, cerca de la famosa Playa de Rodas.
Otras aves de las Islas Cíes
Aunque la gaviota patiamarilla y el cormorán moñudo son las aves más numerosas y reconocidas del archipiélago, existen otros ejemplares de aves muy interesantes en las Islas Cíes.
Gaviota sombría y gavión
La especie de gaviota sombría es de menor tamaño que la patiamarilla, pero sus patas también son de un color anaranjado y el manto de un tono gris oscuro. Para verlas en el entorno del Parque Nacional, hay que esperar a los pasos migratorios, que tienen lugar al comienzo de la primavera y el otoño. Durante estos meses, pueden verse bandos de gaviotas sobrevolando la Playa Rodas.
El gavión es un ave más grande que la gaviota patiamarilla, de color negro, pico robusto y unas preciosas patas de color rosa. Su avistamiento es posible en las mismas épocas en que se ven gaviotas sombrías.
Paíño Europeo y Alcatraz Atlántico
El paíño europeo es un ave marina pequeña, del tamaño de una golondrina, de tono marrón muy oscuro y con una mancha cuadrada de color blanco en la base de su cola.
Puede encontrarse una colonia de, aproximadamente, una docena de parejas en el islote de Boeiro, en Cíes. Al navegar hacia las Islas Cíes, es fácil verlas volar a ras del agua.
Por el contrario, el alcatraz atlántico es un ave marina de gran tamaño, color blanco y con las puntas de las alas negras. Las plumas de su cabeza son amarillas y su pico muy afilado.
En las aguas exteriores del archipiélago es muy sencillo ver estos alcatraces a lo largo de todo el año, especialmente en primavera y otoño. En septiembre, observarlos desde el Faro de Cíes es una experiencia única.
A todas estas aves marinas se les suman la pardela cenicienta, el arao, la pardela balear, el alca o la pardela pichoneta. Además, en los acantilados de Cíes es posible observar halcones peregrinos y, en zonas con menos influencia marina, ejemplares de cuervo grande, vencejo real, chotacabras gris o tórtolas.
Sin duda, la identificación y avistamiento de aves en las Islas Cíes es un plan que no te puedes perder. Consulta los horarios para visitar el archipiélago, solicita un permiso de visita a la Xunta de Galicia y, finalmente, podrás reservar tus billetes con la Naviera Mar de Ons.